Uso de material Montessori en pandemia

Uso de material Montessori en pandemia

Como sabemos, la educación escolar se ha visto afectada con la pandemia, experimentando un menor desempeño académico y un vacío en la formación educativa a nivel mundial. Adaptarse a nuevas formas de comunicar e interacción entre profesores y estudiantes no ha sido fácil en general, en el caso de la pedagogía Montessori tampoco ha estado indiferente ya que se trabaja mucho desde la experiencia con apoyo de materiales interactivos, como colegio nos hemos visto en la necesidad de crear estrategias que nos permitan dicha interacción y trabajo didáctico, retomando poco a poco la presencialidad en modalidad aún híbrida ha facilitado el trabajo práctico pero hay varios factores a considerar tanto para los estudiantes en aula, manteniendo las medidas sanitarias, y para los alumnos conectados de manera online. En esta ocasión la guía Rosario Barrios de Talleres 2 nos cuenta cómo ha sido su experiencia en el uso de materiales Montessori en pandemia.

¿Cuál es la importancia de la metodología Montessori en la educación de los niños?

El Método Montessori busca guiar a los niños hacia la independencia. En las prácticas de cada día se guía a los niños a convertirse en estudiantes independientes a través de actividades, lecciones, materiales y experiencias de aprendizaje que permitan que todos los niños puedan “hacerlo por sí solos”. Por ello, uno de los valores más interesantes del método Montessori es la autonomía que proporciona a los niños. Desde el primer momento, el niño descubre el valor del esfuerzo personal y se acostumbra a su propia autodisciplina a la hora del aprendizaje.

¿Por qué el uso de materiales facilita el aprendizaje?

Los materiales Montessori favorecen al aprendizaje porque al ser manipulativos, los niños aprenden a través de sus manos, al ser sensoriales, aprenden a través de los sentidos y la experimentación, al ser lúdicos, se divierten mientras aprenden. Y al ser repetitivos, aprenden en base de repetir constantemente. Lo cual responde al motor del aprendizaje de este método. Además, cada material posee un objetivo e intención pedagógica acorde a la etapa de desarrollo que se encuentren los estudiantes. Por último, es importante mencionar que, éstos facilitan el aprendizaje activo ya que prevé que los niños sean protagonistas de su aprendizaje, y se conviertan en buscadores activos de conocimiento, con libertad para cuestionar, investigar y establecer conexiones, lo cual despierta su curiosidad y una motivación intrínseca por el aprendizaje.

¿Cómo ha sido el proceso de adaptar el trabajo con materiales a la pandemia?

Ha sido desafiante, ya que, en un principio, tuvimos que adaptar los materiales y presentaciones en versión digital. Siempre intentamos que los estudiantes estuviesen activos desde sus casas. Tuvimos que agudizar la observación en un escenario donde ya no teníamos a los niños frente a nuestros ojos. María Montessori habla mucho sobre seguir y mirar al niño, por lo que además tuvimos que incluir recursos tecnológicos, juegos y aplicaciones, que promovieran la motivación y atención de los niños por aprender a través de la pantalla. Por otro lado, nos vimos en la necesidad de adaptar los recursos y materiales Montessori, y enviarlos a casa para que los confeccionaran y pudiesen manipular el material al realizar clases online o post clases para reforzar con él.  El 2020 fue un remirar la educación, reflexionar sobre nuestras prácticas, presentaciones y ajustarlas para estar acorde a las necesidades las generaciones de esta época.

Al retornar al colegio, de modo presencial, hemos podido, poco a poco, con todas las precauciones, introducir los materiales, lo cual, ha sido esencial para responder a la nivelación que plantea el ministerio, también nos hemos acercado a uno de los pilares de esta metodología, que es el respetar el ritmo de trabajo de los alumnos, lo cual favorece a un aprendizaje tranquilo y consiente. En este sentido, el material juega un rol importante, ya que, favorece la repetición autónoma de quienes requieren reforzar o la extensión para quienes quieren ir más allá.

Según tu percepción, cómo sienten los niños el trabajo en aula tradicional vs el trabajo con materiales Montessori.

Los niños de un aula Montessori, se sienten más autónomos, seguros y tranquilos al trabajar, ya que como he mencionado anteriormente, ellos manipulan o trabajan de acuerdo con su ritmo. El material los concentra en el proceso de aprendizaje y los conecta con sus propias capacidades y competencia, olvidando la competencia con los otros y favoreciendo el desafío personal al sentir satisfacción y goce por encontrar por sí mismo las respuestas. A su vez, en las aulas Montessori, se valora el error como parte del aprendizaje, lo cual también influye positivamente en el concepto académico de cada estudiante, ya que se acoge como una oportunidad para aprender, y no como un castigo o una mala práctica en su proceso. Inclusive, ellos tienen la posibilidad de revisar sus propias respuestas mediante el control de error que tienen dispuesto en las presentaciones o salones Montessori. Lo cual los invita a observar y reflexionar sobre proceso de aprendizaje.

A mi parecer, y gracias a otras experiencias en aula tradicional, veo que los niños aprenden más tranquilos que en las aulas tradicionales, ya que en las aulas más tradicionales los alumnos están obligados a ajustar sus ritmos o acelerar sus procesos para poder cumplir con los objetivos de las clases. Lo cual, no asegura una consolidación real del aprendizaje o de la habilidad que debe desarrollar. A su vez, estas prácticas que estandarizan al grupo para poder avanzar genera en los niños competencia, falta de empatía, ansiedad, baja autoestima o una percepción baja de sus capacidades académicas si no logran avanzar como es esperado o cuando logran en el mismo momento los objetivos planeados.

Nombra una característica del rol participante de los niños con materiales Montessori.

El rol del niño va relacionado con el rol del guía, ya que, si este último se convierte en un observador participante para con ellos, y además propicia un ambiente preparado que sea motivador y dispuesto de los recursos que necesitan para lograr los objetivos; el rol del niño pasa a ser activo en el aula. Esto se evidencia cuando ellos manipulan por sí solos el material, cuando se encuentran construyendo o siendo activos en su proceso de aprendizaje, cuando trabajan a su propio ritmo, concentrados, y reconociendo sus posibles errores y lo revierten con naturalidad, es decir, cuando se observa autonomía y una actitud activa frente al trabajo y también porque no mencionar la alegría, paz y entusiasmos por aprender.

Agradecemos a la profesora Rosario por compartir con la comunidad cómo ha adaptado la metodología Montessori en pandemia en beneficio directo de todos nuestros estudiantes.